24 de agosto de 2012

ADIÓS Tony Scott


El 19 de agosto, el talentoso director de cine Tony Scott saltó de un puente en Los Ángeles, según informes de la policía, el móvil de su muerte fue suicidio. La prensa inmediatamente, empezó a especular. Varias noticias informaron, que la razón de su 'supuesto' suicidio se debía a que padecía de cáncer cerebral y no quería exponer a su familia a la tortura de una muerte lenta y dolorosa. Sin embargo, su esposa descartó ante los medios que haya tenido algún tipo de enfermedad y los exámenes de autopsia preliminares no muestran señales de cáncer en su cuerpo. Entonces, ¿qué razones tendría un aclamado director de cine para cometer suicidio?

La pregunta anterior, no parece tener respuesta. Eso me hizo pensar en el suicidio. Las conjeturas en mi mente, revoloteaban, tratando de encontrar una lógica del por qué alguien atentaría contra su propia vida. Es un tema complejo. No he conocido a nadie que haya cometido suicidio, mas conocí a alguien que sí lo intentó, y por las razones más absurdas. Dicen los psiquiatras que la depresión, es una de las causas por las que alguien comete suicidio. Sé, que la depresión es una enfermedad terrible. Consume a las personas, las lleva a un estado en el que sus acciones no son premeditadas. Es como ser un zombie, una enfermedad te domina y llega al punto de la desesperación, que finalmente, acaba con la muerte.

Realmente es terrible. Muchos luchan cada día por vivir, y otros simplemente se despiden en un parpadeo. Si Tony Scott verdaderamente tenía cáncer cerebral inoperable, la decisión de su muerte, y me disculpan a quienes esté ofendiendo, me parece bastante digna. El cáncer, es una enfermedad horrible, cruel, dolorosa y devastadora. Someterse a quimioterapias, sabiendo que las posibilidades de curarte son escasas, por no decir casi imposibles. Padecer nauseas y toda clase de efectos secundarios, que cada día te agotan más y más. Claro, hay casos que lo han superado, pero se los digo como hija de médicos, que todo depende del estado del cáncer y en especial de la prevención.

Si, la esperanza es lo último que se pierde. Pero cuando te declaran desahuseado, ¿cuáles son las posibilidades? Una parte de mí, entiende que hay que luchar hasta el final. La fe es algo muy potente, nutre el alma de una manera inexplicable. El alma es importante, más que el cuerpo. Si estaría en una posición así- Dios no quiera ni lo permita- no sabría qué hacer. Pero, probablemente, me aferraría a la vida. Es curioso que la muerte sea lo más seguro de nuestro destino, y lo que más evitamos a toda costa. Pero nadie escapa de ella. Por ello, no debemos temer a amar, equivocarnos, disfrutar, sonreír, compartir, llorar y perdonar. Mañana no sabremos si estaremos aquí. 



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